Dolor de amor...


Dicen que en el amor todo vale, que cada uno de nosotros tiene, en el lugar menos pensado, a una persona esperándole. Si claro, pero... ¿Cuantas veces tienes que tropezar hasta dar con ella?

Y es que, cuando te enamoras te das por entero, es tu momento de máxima debilidad. Quedas a merced de esa persona con el pecho abierto y el corazón al descubierto...

Si ese corazón no se arropa, coge frio y, poquito a poco crea una capa de escarcha impenetrable e indestructible.

A veces se envenena, un pequeño virus anida y, despacio (como actúan los venenos más mortales) va expandiéndose hasta que el corazón queda inutilizado y se rompe, se corroe. Pero claro, esto se puede remediar a tiempo: hay que evitar esos pequeños virus que vienen en forma de celos.

Y por último, y no menos importante queda el ataque directo: la puñalada. El más rápido y mortal de todos, el más doloroso. El mundo se cae y te destroza. Tanto es así que muchos no vuelven a abrir el corazón tras haber cicatrizado; no se la quieren jugar al azar ni al destino. Lo dejan oculto para siempre.

Ya sabes qué puede pasar, y sabes que tienes mi corazón en tus manos...
Cuidalo.


A ver qué tal el sábado que me voy a celebrar el año nuevo japonés con mis amigos... xD
Así, como lo leeis.

Espero que todo vaya genial, se os quiere. Espero actualizar pronto.

Sin más, me despido:

~Martukya ©
...volver a disfrutar!!

Comentarios

  1. yo no sabria decir cual duele más....
    y tu happy ending?
    yo creía que eras feliz... esto no pega.

    un besotee.
    MiNa

    ResponderEliminar
  2. me gusta mucho
    tienes muchisima razon al respecto
    da miedo lanzarse teniendo en cuanta la que se te puede venir encima

    fantastico...

    kiss

    ResponderEliminar
  3. Anónimo1:35 p. m.

    Realmente, es fácil abrir tu corazón la primera vez; incluso la segunda puedes hacerlo. Pero después de tantas cicatrices, entiendo muy bien que no quieras volver a abrirlo y confiar su salud.
    Un cristal es muy fácil romperlo :)

    Besos
    Lizzyh.

    ResponderEliminar
  4. Eso es lo malo, el miedo a que vuelvan a herirte y dicho miedo puede llegar a imposibilitarnos encontrar a una buena pareja.
    Pero, claro, ¿cómo se sabe quién es la persona que necesitamos y quién solamente terminará destrozándonos?
    Pues fácil sufriendo mucho xDDD. No hay más salida.

    Besos ;)

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Puedes escribir tu opinión, crítica o simplemente mandar un saludo.
Gracias,

Martu

Entradas populares de este blog

Mero interés...?

Feliz Navidad

Tiempo ha desde que llovió